14 de septiembre de 2007

Hubiera

El hubiera no existe, a menos que me hubiera acordado de que estabas vivo, ni el estúpido camino que se quedó truncado, ni el amanecer en tus brazos, ni la sensación de no haberte creído, ni la luna color brillante, ni las noches sin fin, ni... En las noches cuando trato de dormir empiezo a cabilar por las nubes, me subo a las estrellas y me pongo a imaginar, de mi y de tú y de ambos, pero me gana el cansancio y regreso a la cama, ya ahí no suelo pensar nada, me recuesto, y, me pierdo, hay veces en que sólo duermo y es que si sueño... Me da por verte ahí.

EL hubiera no existe, a menos que te hubiera conocido y te hubiera abrazado, y te hubiera amado, a menos que hubieras estado en el mismo lugar en el que estoy parado.





Inanna*

No hay comentarios: