Y nunca dices nada.

Ven, siéntate, para ser sincera me extrañó mucho tu llamada, sí, de verdad… Ya sabes de aquel día que bueno, tu sabes… Pensé que jamás volvería saber de ti, eso deseaba… O quería pretender que deseaba, y bien… ¿Qué tienes que decirme? Ahora ¿qué arma traes entre los labios? Perdiste el mapa que te compraste para seguir tu camino… Los caminos hay que seguirlos sin mapas, las pistas para llegar a donde queremos, no están en la tienda de la esquina… Esas se encuentran en el reflejo de los ojos del que te mira, en las caricias que te dejan inmóvil, en los sonidos del viento… ¿No dices nada? Nunca dijiste nada… Yo que pensé que ésta nube que hoy se vuelve a poner en mi cabeza, había volado al cielo, que se había escondido entre miles de algodones de color, y que había tomado a alguien más como rehén… ¡Un momento! Las cosas no han sido como hubiera pensado, terminé por arrancarme casi llevándome la piel el secreto que guardan tus ojos.
Descubrí del pasado que ya se fue, se quedo en aquel desván encerrado bajo llave, y ésta la lancé lo más lejos que pude, me inventé un nuevo idioma, y busqué los pedazos que no existían… Aprendí a guardar los te amos en una caja de nubes, y a no dejarlos salir a menos que se caigan solos… Es tan distinto hablar ahora… Y no dices nada.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

Sólo eso.

Tres meses y sigo haciéndome las mismas preguntas, ya se que no tienen respuesta... Ahora solo se que en algún momento, en aquel lugar en donde el cielo es muy azul, y la tierra está cubierta de rosas me encontrare contigo, y te daré ese beso que al despedirme no pudiste responder... Eres mucho mas de lo que te imaginas, eres todo lo que quisiste ser, y mas aun... Suelo pensar y sentir que andas por la casa como antes, hay veces en que siento tu aliento y tus pasos, y tu risa, y me se agranda el corazón cada que imagino te abriré la puerta. No te voy a decir mentiras, duele, todavía duele y mucho, y no se cuando tiempo dolerá, tampoco tengo prisa.

Ahora, ahí, donde el aire es de color azul, y donde el cielo no es cielo por que ya no hay mas arriba, ves las cosas desde otra perspectiva y seguro has de estar contando las risas y las lagrimas, los pasos y caídas de todos los que dejaste. Suelo pensar que te espero en una banca del parque y… Te extraño, solo puedo decir... Te extraño.

Sólo tú me enseñaste que el Amor existe, y que además... Es Eterno... Gracias.. J.C.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

Cansado.

Me escondo en el sillón de arriba
El que se llenó de polvo de tanto esperar
El que me sirvió de apoyo una noche fría
El que se cansó.
Voy a reconciliarme con el destino
Hacer de cuenta que ya olvidé y que sigo vivo
Trataré de volver a ver las flores
Encontrar los caminos que perdí
Y esa luz…
Voy a hacer de cuenta que soy eterno
Y andaré por el aire
Convirtiendo los sonidos en instantes.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

Aire.

Incluso el aire se llevó los pocos sentidos que me quedaban...

Tendré que salir al balcón a ver quién subasta un corazón...

Cansado de andar huyendo, huyendo del cansancio....

Acordonando la zona de desastre...

Cobijando nostalgias con frío...

Me soñé despierto y me vi en el espejo sin cristal...

Y se me olvidó que dejé mi cuerpo...

Junto con dos mil secretos bajo llave.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

En ti.

Descubrí un hoyo en la pared de tu cuerpo
Un escondite perfecto al amanecer
Un murmullo distante
Una caricia alrededor de dos soles
Descubrí dos motivos para dormir plácidamente
Para tornar mis sueños
Para formar palabras en sílabas
Un abrazo absorbente
Encontré el camino a la felicidad
La curvilínea esencia de tu ser
Una tibia salida
Susurros al viento
Y al final del viaje
Me detuve a verte
Y decidí…
Que volvería una y otra vez
A caminar en ti.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

En Medio.

¿Dónde se buscan las palabras rotas?
Se gastan y se congelan en el tiempo
Arrastrando sus vagos pensamientos
Pasando por los parques que no conocían
¿Palabras? ¿Cómo puedo definir el camino?
Y afuera en la calle todos llevan armas en la boca
Lanzándolas al vacío como bombas nucleares
Dejando cuerpos sin vida, con media lágrima en el rostro.

Las paredes se esconden
Se privan de las corrientes de aire
Y se mojan las ganas con agua de mar
Inventan canciones para no llorar
Susurran instantes
Comen recuerdos
Matan pasiones
Olvidan.

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

Adentro.

Desde el destino, desde la tormenta, desde el día soleado que no ha llegado… Se asoman mis ojos buscando entre huecos un indicio de ti, los días se vuelven oscuros, y las noches son siempre noches, jamás una de ellas ha durado tanto.
Sujeto con fuerza una piedra que me sostiene de éste lado, mis manos se hieren de tanto aferrarme a un lugar.

Me faltan tus palabras fuertes, llevo mucho sin verte, llevo tantos días pensando en ¿qué me dirías en éste instante? Y eso que nunca he visto tus respuestas, hablo y hablo y no hay solución… Y es que a ese alguien que a veces veo, se le olvida que debe hacerse presente.

Me pasa muy seguido… Pero no se detiene, me pasa de largo y me deja sacudiéndome el polvo y comiendo respuestas que no entiendo, ya no entiendo que pasó, ya no se para donde te fuiste, te he buscado por todos lados, incluso donde siempre se que estás; y nada…

Estoy hablando contigo, que soy yo, y me pregunto ¿En qué momento me perdí?

Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*

Seis Años.

Y ahí estaba yo, asustada, ansiosa, casi sin saber que hacía, y tu con la fuerza del mundo tocabas las puertas para entrar en mi vida… Tenía miedo, temía no saber como tocarte, como hacer para que sonrieras, incluso no sabía ni tu nombre, me gustaba dormirme pensando en tu cara, en tus manos, en tus piernas, en tu tibia sonrisa y en tus ojos, eras un enigma fabuloso, eras como una noche eterna, esperando ver los rayos del sol, no sabía para donde mirar, mis movimientos eran torpes, había veces en que prefería no moverme, y cargaba conmigo la dulzura de tus ojos, y lo terso de tus manos, llevaba colgados tus pasos callados, tus labios cerrados, tus sueños y tus fantasías.

EL día era perfecto, el sol sonreía (también era feliz) soplaba el aire muy fuerte, podría parecer que estaba una tarde de primavera, aún y cuando el invierno no se había ido; no estaba lista, pero todo estaba preparado para conocerte, si por mi hubiera sido, hubiese corrido de ahí, y retrasar el momento diez veces, pero me ganaban las ganas de verte, la hora no la sabía, pude haber esperado lo que fuera por verte por primer a vez.

No tardaste mucho, luche con todas mis fuerzas para no rendirme, y el cinco quince se volvió mi número de la suerte, te escuché desde afuera, aunque cansada y muy lastimada, pude oír la voz de tu llegada, y mi corazón tembló, traté tres mil veces de abrir los ojos, pero aun no podía… Y la puerta se abrió, y con ella el cielo me abrió las puertas, una luz casi cegadora entro por la ventana que fabriqué, sí habías llegado, estabas justo enfrente de mi, ahí, por fin… Te vi, y cuando lo hice, sentí por primera vez la verdadera y más pura felicidad, te abrasé quería transportarte en una nube, formarte una burbuja de ilusiones y de magia, rodearte de besos y de pétalos de rosas, formar una muralla de acero para evitarte cualquier dolor y sufrimiento… Y vi tus ojos y enseguida me di cuenta que no podía hacerlo, y por primera vez, tuve miedo, de ese miedo que te arruga el corazón… Y tomaste uno de mis dedos, lo apretaste, fuerte, muy fuerte, y supe que el miedo siempre estará, pero también siempre estarán mis manos.

No quiero que tu vida sea perfecta, por que quiero que sepas lo que es vivir, no quiero dártelo todo, por que quiero que disfrutes tus propios logros, no quiero abrirte todas las puertas, por que tú traes las llaves en tus manos. Son seis años contigo, los mismos que llevo queriéndote hacer feliz, y aun sigo sintiendo como tiembla mi corazón cuando aprietas mis dedos. Tú eres el único que me haces la más fuerte, y la más débil al mismo tiempo.

Seis años… Y grandes sueños en tu cabeza, seis años y miles de retos en tus manos, seis años y todo el infinito en tus pasos… Te amo.






Una Palabra Al Aire... Son como las Hojas que Van Cayendo... Inanna...*