31 de diciembre de 2009

Parte Setenta y Tres: El recuento De los Daños.

Enero: Siempre Enero está lleno de contrastes, soy la más feliz de todas las mujeres de este mundo, así que cada cinco me lleno la boca diciendo que no hay mujer más feliz que yo, al tener a la personita más maravillosa de todo el mundo a mi lado. Enero pasó como pasan otros tantos meses, parecía que todo iba bien, o mejor dicho, "normal".

Febrero: Dije muchas cosas que no pensé que diría, creí (otra vez) en palabras y cosas que ya no vale mucho la pena recordar, el caso es que cuando mejor me sentía, Febrero hizo de las suyas y me dio una patada en el trasero dejándome más o menos moribunda. Creo que no olvidaré ese día, por más que trate, es algo que me dejó sin aliento. Pero bueno, creo que por algo pasan las cosas.

Marzo: Simplemente no podía ni con mi alma -y eso que ya no tenía- por más que hacía por sonreír, cada vez lloraba más y más, y es que el dolor no se va, no'más no se va, como si le gustara que uno se revolcara en él. Planeaba una huida.

Abril: Hubo despedida, mientras de mi lado el dolor se encarnaba más en mi piel, la gente a mi alrededor era feliz. Abril, fue de vacaciones. Hice, des hice, hablé, bebí, soñé, reencontré. Hasta que tuve que regresar.

Mayo: Día de las mamás, Influenza y todo eso. Entre que son peras o manzanas, todos freaks ni salíamos de la casa siquiera, Mayo fue bastante tranquilo, mejor dicho aburrido.

Junio: Recital en la Casa de la Cultura, eso si me pareció bien chido, jamás me hubiera imaginado estar ahí, y bueno, rostros y manos recién estrenados por mis ojos llegaban a mi.

Julio: Creo que no lo recuerdo, o quizá no quiero.

Agosto: Nada pasa y aún así siento que el vacío está justo dentro de mi.

Septiembre: ¡ay! que días de Septiembre, entre el grito de Independencia y el grito de desesperación, al sentir que alguien en algún lugar del mundo está viviendo una vida que me tocaba a mi, es digno de llorar por lo menos unas seis horas seguidas. Así que me juré no volver a llorar, no soltar más lágrimas, por lo menos no por esa razón. Unos ojos se asomaron a los míos.

Octubre: Empezaba a ser menos infeliz, entre mi cumpleaños y esos ojos asomándose, todo parecía cambiar el color y la historia. Una noticia me paralizó el cuerpo y la boca.¿Qué tan fuertes pueden ser los pensamientos y obvio las palabras? ___________________ Ni siquiera puedo describir lo que sentía. Por otro lado, volvía a respirar profundo y a dejarme llevar un tanto por lo que estaba por ocurrirme.

Noviembre: Boda + Novios = Después de todo Dios y el Amor, sí existen -Lo digo bajito- Ay que cosas, después de tanto despotricar en contra del amor y los enamorados, de nuevo las situaciones me dan una patada en el trasero y me hacen tragarme todas y cada una de las palabras que dije. A mitad de Noviembre, ya no pertenecía al Club de los Solteros Amargados y Hostiles. El negro de los Días, estaba tornándose más y más rosa que nunca.

Diciembre: Me reconcilié con la vida, parece ser y para mi fortuna, que Dios está en todos lados, nos da y nos quita cuando lo merecemos, por más injusto que parezca, todo lo pone en el lugar correcto. Soy feliz - y eso que ya había olvidado como se es feliz - No se cuanto tiempo, tampoco se que pasará, pero vuelo, y eso me gusta.



En el Recuento de los Daños, creo que lloré mucho más que otros años, sufrí tanto más que todos los últimos años, contrastes bastante fuertes este año. Al final creo que todo está en el lugar correcto.


Ahora puedo decir que: ¡Soy una orgullosa sobreviviente del 2009! ¡Gracias!

23 de diciembre de 2009

Parte Setenta Y Dos. En secreto.

Siento una profunda nostalgia, ganas de llorar, quizá gritar un poco, reírme más. Es raro y lo es por que no tengo motivo alguno por el cual estar así y no, tampoco estoy en mis días. ¬¬

He traído durante el día unos suspiros largos, largos. Todavía que veo que el tiempo ha pasado y no estoy dormida, a veces no creo lo que está pasando, y puede que esto sea cierto mecanismo de defensa para al corazón, o sólo puede que sea una tontería.

Lo diré bajito: El amor existe.